Los trabajadores mexicanos trabajarán 40 horas semanales y tendrán al menos dos días de descanso por cada cinco que presten servicio, según una reforma constitucional aprobada hoy.
La reducción de la jornada laboral, mediante un cambio en el artículo 123 de la Constitución, se avaló en la Comisión de Puntos Constitucionales con una mayoría de 27 votos a favor y cinco abstenciones del derechista Partido Acción Nacional (PAN), y se plantea se discuta en el pleno de la Cámara baja del Congreso este miércoles.
Esta modificación es significativa porque México es uno de los países del mundo donde más horas se trabajan al año, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Los mexicanos trabajan 2.124 horas al año, por encima de Costa Rica (1.913), Rusia (1.874) y Japón (1.598), según la OCDE.
El número de horas es similar en Colombia, Brasil, Perú y Argentina, donde al igual que México la jornada laboral es de 48 horas semanales y suele darse un solo día de descanso, habitualmente el domingo.
La reforma en México trasciende después de que Chile aprobó este mes reducir la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales.
Con esta modificación se reduciría la jornada de cualquier trabajador mexicano de seis a cinco días por ley, o bien a un máximo de 40 horas, incluyendo a obreros, jornaleros, empleados domésticos, artesanos “y de una manera general, todo contrato de trabajo”, según la ley.
El dictamen aún debe pasar por el pleno de los diputados mexicanos y requerirá del consenso de al menos dos terceras partes del Congreso por ser una reforma constitucional.