CIUDAD DE MÉXICO.- Dos años separan a Blue Demon Jr. de llegar a cuatro décadas como luchador profesional, un momento que marcará su carrera, pues cuando celebre sobre el ring, iniciará la gira del retiro.
“Cuando cumplí 30 años de luchador profesional, festejé con una función en el Royal Albert Hall de Londres”, recuerda, en entrevista exclusiva con EL UNIVERSAL Deportes, y aunque desconoce en qué arena festejará sus 40 como esteta, “sé que ese día iniciará mi gira del retiro. Lo que tenga que durar. Pisaré todas las plazas que han sido parte de mi carrera en la lucha libre”.
Legado azul que no morirá, advierte, ya que la tercera generación está puliéndose: “Al igual que me pasó con mi padre, compartiremos el ring durante algún tiempo, hasta que sea el momento de irme”.
Ha sido una carrera larga, “sólida y hasta cierto punto pesada”, acepta. “Porque cumplir con el estándar del personaje, mantenerlo vigente y hacer una carrera a la par de mi papá, no era fácil”.
Además, nunca pensó que un personaje tan grande le estaba destinado. En casa, su madre tampoco veía con buenos ojos que él se convirtiera en gladiador: “Después, me confesó que era muy difícil ver a su esposo en el ring, y no me quería como luchador. Iba a ser una doble tensión para ella”.
El heredero del Manotas debutó en 1985. Era muy joven y no dimensionó el momento: “La responsabilidad que representaba no dejar morir el personaje de Blue Demon era grande, así que cuando mi padre falleció, en el año 2000, seguí adelante”.
La gente había perdido a su ídolo y a él lo pusieron en su lugar: “Cambió todo, fue una época de mucho trabajo, de aceptación para mi desempeño”.
Lo más difícil, “ha sido la pérdida de mi padre, mi ídolo, mi confidente, mi entrenador, mi todo. En mi debut, me dijo que arriba del cuadrilátero iba a ser un compañero más”.