El Gobierno de Colombia ha decidido “suspender” el alto el fuego bilateral con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), después de que la guerrilla informara el martes que no había ningún consenso para poner en pausa las actividades armadas de ambas partes.
El ministro del Interior de Colombia, Alfonso Prada, anunció que el Gobierno suspendió “los efectos jurídicos” del decreto de cese el fuego bilateral anunciado con el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
“Ante la posición asumida públicamente el día de ayer hemos decidido suspender los efectos jurídicos del decreto 2657 del 31 diciembre de 2022 y en el siguiente ciclo (de negociación) se reactivaría el diálogo sobre este particular”, manifestó el ministro en una rueda de prensa en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo.
Prada invitó además “a esta organización a declarar una tregua verificable en respuesta al imperativo de las comunidades étnico territoriales y campesinas”, mientras se resuelve el asunto del cese el fuego bilateral.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, convocó este miércoles a primera hora una reunión de urgencia para examinar lo ocurrido.
Acompañado por el ministro de Defensa, Iván Velásquez, y el Alto Comisionado para la Paz, Danilo Rueda, Prada explicó que las Fuerzas Armadas “conservan la plenitud de las facultades” en la ofensiva contra los guerrilleros, lo que abre la puerta a nuevas medidas hasta que haya algún tipo de pacto.
El Gobierno quiere “dar el tiempo necesario” para acordar en la mesa de diálogo con el ELN los protocolos que deberían regir esa posible tregua. Una vez que esas medidas estén “totalmente acordadas”, entrará en vigor el decreto de alto el fuego, explicó el ministro.