El Instituto Municipal de la Familia ha buscado generar acompañamiento con familiares de personas privadas de la libertad que se encuentran recluidas en el Centro de Readaptación Social, con el objetivo de cambiar el estigma social que padecen, informó la directora Lucía Hernández.
En este sentido, señaló que han buscado generar círculos de apoyo con distintos grupos familiares, tanto de hombres como mujeres que se encuentran recluidos, para trabajar aspectos de apoyo psicológico que puedan ayudarles a mejorar su situación emocional.
En específico, Lucía Hernández mencionó que se han dado estás terapias grupales pensadas para pasar el duelo que representa ver a un familiar perder su libertad, de manera que se puedan superar cuadros depresivos.
Dentro de estos procesos, el instituto registró la participación de 25 familiares, además de 45 para otro proceso de apoyo grupal dirigido exclusivamente para mujeres.
Subrayó que un punto importante es fomentar, tanto para los mismos familiares, como para la sociedad, el no caer en juicios morales, pues son estos los más empleados como ataques que pueden vulnerar psicológicamente a madres, padres, esposos, esposas e hijos.
Alan García