Jair Bolsonaro y Luiz Inacio Lula da Silva comenzaron el proceso de transición presidencial en Brasil, informaron ambos equipos este jueves.
Se sabe que Lula da Silva, presidente electo de Brasil, se reunión con Jair Bolsonaro para afinar algunos detalles para el cambio de presidentes en ese país.
Aunque, hasta el momento no existe el reconocimiento oficial de la derrota por parte de Jair Bolsonaro o los integrantes de su gabinete.
La transición ya comenzó», dijo a periodistas el vicepresidente de Lula, Geraldo Alckmin, tras mantener una conversación «provechosa» y «objetiva» con Ciro Nogueira, jefe de gabinete del mandatario saliente en el palacio presidencial de Planalto.
Alckmin, de 69 años, afirmó que definirá los integrantes del equipo de transición luego de reunirse en los próximos días con el mandatario electo, de 77 años, quien -dijo- está tomando un descanso tras meses de una intensa campaña electoral.
Encargado por Lula para coordinar el cambio de gobierno, Alckmin, un centrista que fue gobernador de Sao Paulo, ya había mantenido contactos con representantes de Bolsonaro, en medio de la incertidumbre que provocó el silencio de dos días del presidente y los bloqueos de rutas tras su estrecha derrota en el balotaje del domingo.
El equipo de Lula, que por ley puede incluir hasta 50 funcionarios, trabajará a partir del lunes y durante los próximos dos meses en oficinas del Centro Cultural Banco de Brasil, un enorme edificio cerca de un lago en la capital brasileña.
A la reunión también asistió la jefa del Partido de los Trabajadores (PT) de Lula, Gleisi Hoffman, y el coordinador del programa de gobierno de Lula, Aloizio Mercadante.
Previamente, Alckmin mantuvo un encuentro con el relator para el presupuesto en el Senado con el objetivo de buscar maneras de incluir en los gastos federales de 2023 las promesas de campaña de Lula, que asume el poder el 1 de enero.
Excelsior