El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se metió de lleno en la campaña para las elecciones de noviembre, al lanzar este martes dardos contra los republicanos durante un viaje a Pensilvania.
Dijo estar decidido a prohibir los fusiles de asalto y criticó la renuencia de los republicanos a regular el acceso a las armas de fuego porque le tienen miedo a la NRA, el poderoso lobby defensor de las armas.