La selección mexicana de natación sincronizada viajó a Hungría para competir del 17 al 25 de junio en el Mundial de Budapest en donde participarán en seis pruebas, dos de ellas por primera ocasión con el objetivo de ubicarse entre las 10 mejores de su disciplina.
«Vernos con el equipo, con un Mundial sumamente atípico, hay cambios de parejas, hay niñas que se retiraron, otras que continuamos, el ranking puede cambiar muchísimo», aseguró Nuria Diosdado y agregó: «Hay que aprovechar, ahorita todos los países tienen problemas, todos los países han tenido movimientos, no ha sido una época fácil para nadie. Estos movimientos favorecen a los que hemos estado entrenando».
Las ondinas mexicanas resaltarán una vez más el amor a su país por lo que tendrán como temas de sus rutinas la cultura azteca y la mariposa monarca. Además de que tendrán participación por primera ocasión en dueto mixto con Jorge Lepe y Trinidad Meza.
«Vienen a reforzar esta modalidad, están muy compenetrados, es más bien que vayan, que nos demos a conocer. Que México ya tiene nado sincronizado varonil también y obviamente todo con miras a los Juegos Panamericanos».
La edición 13 de este certamen mundialista será una prueba de fuego para el equipo porque buscarán regresar a una justa olímpica para Paris 2024, algo que no ocurre desde Atlanta 1996.
«Realmente este año como reforzamos niñas de la categoría junior, teníamos muchos años sin entrenar juntas entonces no hubo tiempo de cambiar los duetos, los duetos se cambiarán para el próximo año para pelear el pase olímpico. Ahorita es darlo todo tanto en duetos, equipos en cada rutina en la que se caiga poder demostrar que México sí estuvo fuera tres años, pero no dejó de entrenar».
Marca Claro.