En el marco del Día Mundial del Paludismo o Malaria, enfermedad que se transmite a través de la picadura de mosquitos, la Secretaría de Salud del estado de Querétaro se sumó a la conmemoración e informó que la intensidad de la transmisión depende de factores relacionados con el parasitó, y el medio ambiente.
Fue en 2007 cuando los estados miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS), declararon el Día Mundial del Paludismo para el 25 de abril en la Asamblea de la Salud.
A pesar de que esta enfermedad se puede prevenir y tratar, sigue ejerciendo efectos devastadores en la salud y los medios de subsistencia de las personas en todo el mundo. Se estima que, en 2020, se produjeron 241 millones de casos de paludismo y 627 mil defunciones relacionadas con esta enfermedad; más de dos tercios de los fallecidos eran niños menores de cinco años que vivían en la región de África de la OMS.
Desde el año 1998, no se han presentado casos autóctonos en el estado de Querétaro, sin embargo, se continúa haciendo búsqueda de casos en zonas en donde habita el mosquito Anopheles.
Los síntomas del paludismo incluyen fiebre, escalofríos, sudoración, vómitos, dolor de cabeza, los cuales, aparecen a los siete días o más, de forma general entre los 10 y los 15 días, de la picadura del mosquito; si los pacientes no son atendidos con oportunidad, pueden complicarse.
El diagnóstico se realiza mediante un examen microscópico de gota gruesa de sangre. Al detectar un caso sospechoso de paludismo, se desarrolla protocolo de vigilancia epidemiológica para la búsqueda de casos de forma intencionada y acciones de las brigadas de vectores.
Existe tratamiento médico para el paludismo, y este depende de la edad y estado de salud de las personas.
Servicios de Salud del Estado de Querétaro (SESEQ) realiza acciones para la eliminación del vector, haciendo énfasis en los municipios con probabilidad de reaparición de la enfermedad: Jalpan de Serra, Pinal de Amoles, Landa de Matamoros, Arroyo Seco, San Joaquín, Tolimán, Peñamiller y Cadereyta de Montes.
Entre las acciones de prevención y control se realiza: detección de enfermos febriles en área endémica mediante estudio de gota gruesa, promoción de la notificación mediante visitas programadas a notificantes voluntarios, búsqueda de casos probables en localidades del área endémica, control del mosquito mediante medios físicos (promoción del saneamiento básico de la vivienda y eliminación de criaderos del mosquito Anopheles), así como difusión de recomendaciones para evitar el paludismo.