El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo el viernes que en lo que va de julio se han destruido 27,000 empleos formales en el país latinoamericano, aunque se mostró esperanzado en que el balance a fin de mes no refleje una pérdida de puestos de trabajo.
Durante los meses en que se suspendieron la mayoría de las actividades económicas y la población estuvo confinada en sus domicilios para frenar el brote de coronavirus en el país, desde mediados de marzo hasta junio, se perdieron más de un millón de empleos formales, según datos oficiales.
Sin embargo, el mandatario explicó que la economía informal es la que más ha sufrido durante la crisis derivada de la pandemia porque en México más de la mitad de la población trabaja sin contrato ni prestaciones laborales.
Excélsior