Los Washington Nationals estaban catalogados como el equipo víctima antes de comenzar la Serie Mundial 2019, incluso como uno de los más desfavorecidos desde 2007, siendo la otra parte de la ecuación los Houston Astros, los grandes favoritos para capturar el título en el Clásico de Otoño, pero parece que las dos novenas revirtieron sus roles luego de los dos primeros juegos.
Con un racimo de seis anotaciones en el séptimo inning, los Nationals se abrieron camino para ganar el Juego 2 de la Serie Mundial por la escandalosa pizarra de 12-3 sobre unos Astros que están metidos en un profundo agujero del que solo el 16 por ciento de los equipos que se han visto en ese escenario han podido remontarlo. El último en hacerlo fueron los New York Yankees en 1996.
Los Nationals mantuvieron el fuego con el que arrancaron el Clásico de Otoño en el Juego 1. Trea Turner negoció boleto y luego Adam Eaton pegó hit, abriendo la puerta para que Anthony Rendón conectara sendo doblete para empujar las dos primeras del partido, silenciando Minute Maid Park por lo contundente y tempranero del ataque en la apertura del primer episodio. Justin Verlander con otro tambaleante arranque.
Sin embargo, los Astros no se iban a quedar callados. En el cierre del mismo primer capitulo, los campeones de la Liga Americana respondieron. Aunque José Altuve pegó doblete y fue pillado en intento de robo de tercera base, Michael Brantley dio sencillo, que dio pie a que Alex Bregman llegara al plato y pegara jonrón de dos carreras para empatar el juego 2-2 y despertar a un aletargado y nervioso público local y también darle un ‘raspón’ al abridor de los Nats, Stephen Strasburg, quien se apuntó el triunfo al lanzar por espacio de seis entradas, toleró siete hits, uno de ellos cuadrangular, dos carreras, un boleto y siete abanicados.
Luego de transitar por seis entradas aceptables, Verlander llegó al séptimo inning y no empezó del mejor modo. Permitió jonrón solitario a Kurt Suzuki que ponía en ventaja 3-2 a los Nats. Luego, dio base por bolas a Víctor Robles, y luego pasaporte a Trea Turner. Hasta ahí llegó el hombre quien antes había roto la marca de más (200) ponches en la Postemporada. Pero la herencia que dejó fue maldita para el relevista Ryan Pressly. Verlander cargó con el revés al permitir cuatro carreras en seis innings, siete hits, uno de ellos jonrón, caminó a tres y ponchó a seis.
Los Nationals anotaron seis carreras, un racimo que desmoralizó a los Astros no por permitir esas seis anotaciones, que en una Serie Mundial no son poca cosa, sino por los matices por los que se produjeron. Pese a tener las bases llenas, Howie Kendrick pegó un rodado a la tercer base que Bregman no logró contener a la primera, pifió y nunca pudo recuperar y tirar. Ahí entró la cuarta de Washington en los spikes de Robles.
Las almohadillas seguían congestionadas de corredores de los Nats cuando Asdrúbal Cabrera pegó línea de hit al central que remolcó dos más, mandando a Juan Soto y a Turner al plato para ampliar a 6-2 la pizarra. Pero la ‘hemorragia’ no se detendría ahí, ante el asombro, el tedio, y la inevitable sorpresa del público de los Astros, habituado a ver a su equipo a hacerle lo que les estaban haciendo ahí mismo.
Ryan Zimmerman bateó rodado al cuadro, a la antesala, pero el tiro a la inicial por parte de un ya cimbrado Bregman, fue desastroso y esto permitió que entraran dos más, timbradas por Kendrick y Cabrera que ya ponían el score 8-2 en un parque que se comenzaba a vaciar por la irreversible diferencia.
Trea Turner, todavía en el octavo capítulo, pegó jonrón por todo el right field con Robles en los senderos, para aumentarle más a la miseria del equipo que llegó como el gran favorito para capturar el título de Serie Mundial, pero la pizarra se ponía 10-2. Sin embargo, Cabrera puso el ‘último clavo en el ataúd’ de los Astros cuando pegó sencillo al center que mandó al pentágono a Soto para remarcar un sonoro 11-2 en el score.
Pese a que los Astros anotaron una carrera más, la serie ahora se traslada a Washington donde, de no haber una reacción que le dé un vuelco a las cosas, la contienda puede concluir en la capital estadounindense. Para el juego 3 está anunciado Zack Greinke por Houston y Aníbal Sánchez por los Nats.
Fuente: TUDN
Foto: Especial