El gobierno de EU anuncia que impedirá otorgar el asilo a los migrantes que no lo soliciten antes en un ‘tercer país seguro’, en un nuevo intento de reducir el flujo migratorio en la frontera con México
El gobierno de Donald Trump inició gestiones el lunes para no aceptar más solicitudes de asilo de migrantes centroamericanos que llegan a la frontera, en una escalada importante de la batalla del mandatario norteamericano para frenar la cantidad de personas que cruzan la línea divisoria entre Estados Unidos y México.
Un extranjero que entre o intente entrar en Estados Unidos a través de la frontera sur después de no haber solicitado protección en un tercer país fuera de sus países de ciudadanía, nacionalidad o de última residencia legal habitual que hubiese transitado en camino a Estados Unidos no es apto para asilo», señaló la nueva orden publicada en el Registro Federal y que entrará en vigor este martes.
La normativa, presentada por el Departamento de Justicia y el de Seguridad Nacional, deberá entrar en vigencia el martes y se aplica incluso a niños que hayan cruzado la frontera solos.
La orden se da a conocer el mismo día en el que estaba previsto que el presidente guatemalteco, Jimmy Morales, se reuniera con su colega estadunidense, Donald Trump, en la Casa Blanca entre rumores acerca de la posibilidad de que firmara un acuerdo para convertir a Guatemala en tercer país seguro para los migrantes que buscan el asilo en Estados Unidos.
Sin embargo, la Corte de Constitucionalidad (CC) de Guatemala otorgó la noche del domingo un amparo provisional para que Guatemala no sea convertida en un tercer país seguro para migrantes.
En un comunicado, el secretario interino de Seguridad Nacional, Kevin McAleenan, defendió que esta medida rebajará en última instancia las «abrumadoras cargas» sobre el sistema nacional «causadas por los solicitantes de asilo que no buscan protección urgente en el primer país disponible, migrantes económicos que carecen de un miedo legítimo a ser perseguidos».
Es casi seguro que la política será apelada en tribunales.
La ley estadounidense permite a los refugiados solicitar asilo cuando llegan al país, independientemente de cómo lo hayan hecho, pero existe una excepción para aquellos que han arribado a través de una nación considerada “segura”.
En la actualidad, sin embargo, Estados Unidos solo cuenta con un acuerdo específico al respecto en el que reconoce como «tercer país seguro» a Canadá.
Pero la Ley de Inmigración y Nacionalidad, que rige la ley de asilo, es vaga sobre qué país es considerado “seguro”; solo dice que “en virtud de un acuerdo bilateral o multilateral”.
Trump, quien llegó a la Casa Blanca en enero de 2017 con la promesa de una política de mano dura en materia migratoria, ha declarado una emergencia nacional por la «crisis humanitaria» que, a su juicio, se vive en la frontera con México y ha acusado a los países del Triángulo Norte de Centroamérica (Honduras, Guatemala y El Salvador) de no hacer lo suficiente para frenar el flujo migratorio.
Hace unas semanas, alcanzó un acuerdo con el Gobierno del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, para que reforzarse su frontera sur con Guatemala y acogiese a solicitantes de asilo en Estados Unidos en proceso de espera.
El Gobierno de Guatemala informó el domingo que la reunión que estaba prevista para este lunes en la Casa Blanca entre Jimmy Morales y sería reprogramada.
Excélsior