En la ciudad chilena de Copiapó, un hombre de 19 años quedó en prisión preventiva tras ser acusado de colocar veneno para ratas en comida de la compañía distribuidora de alimentos donde trabajaba.
De acuerdo con información de medios locales, el criminal -que laboraba como auxiliar de aseo- accedió a una cámara de refrigeración y comenzó a verter la sustancia tóxica en las bandejas de alimento que ahí se almacenaban.
Para su desgracia -pero por fortuna para muchos- su acción fue advertida por otra empleada que alertó de la situación.
El fiscal Luis Miranda Flores detalló que el joven está acusado en virtud del artículo 315 del código penal chileno por «envenenar alimentos destinados a ser distribuidos a terceros, hecho que se sanciona duramente por la gravedad que implica poner en riesgo la salud pública».
El Juzgado de Garantía de Copiapó accedió a la petición de prisión preventiva y fijó un plazo de dos meses para finalizar la investigación.
Por su parte, el detenido alegó que lo hizo en venganza por un supuesto acoso laboral que sufría de parte de otros empleados de la compañía.
