Alrededor del mundo existe un debate en el que se toca el tema de las mujeres en el transporte público.
Mientras algunos señalan que hay que ceder el asiento a las féminas por educación, otros argumentan que no es obligación y que los varones ‘también se cansan’.
Sin embargo, lo que si es casi de ley es cederlo a una mujer embarazada o a una persona de la tercera edad, ya que por sus condiciones físicas les es imposible estar de pie un largo rato.
Lamentablemente, existe gente inconsciente que prefiere que sus pertenencias ‘descansen’ antes que ofrecerle el asiento a alguien más.
Recientemente se hizo viral el caso de una mujer querelató su experiencia en las redes sociales.
Y finalmente sucedió en mi octavo mes de embarazo: me acabo de sentar sobre la mano y el bolso de un hombre que no quiso quitarlos del último asiento libre en el autobús. Ahora estamos compartiendo un viaje muy silencioso escribió Brydie Lee-Kennedy en Twitter.
Tomando este tema como base, otras usuarias compartieron anécdotas similares debajo de la publicación que acumuló más de 17 mil ‘me gusta’.
Cuando estaba embarazada le pregunté a un sujeto si podía compartir su asiento conmigo en el autobús, sin embargo, él abrió sus piernas y me dijo ‘No’. Fue como un: ‘Lo siento, mis bolas necesitan ese espacio'», contó otra usuaria.
¿Tú que piensas acerca de este tema?
