Jean-Louis Tauran, el cardenal que el 13 de marzo de 2013 anunció la elección del Papa Francisco desde el balcón central de la Basílica de San Pedro, falleció la víspera, confirmó hoy el Vaticano.
El purpurado francés, de 75 años, se encontraba en Connecticut, Estados Unidos, por un tratamiento de la enfermedad que padecía, el mal de Parkinson. Se alojaba en la comunidad de las Hermanas Franciscanas de la Eucaristía, en la Arquidiócesis de Hartford.
Nacido en Bordeaux, Francia, el 5 de abril de 1943, era reconocido como un fino diplomático vaticano. Ordenado sacerdote el 20 de septiembre de 1969, fue enviado a Roma en 1973 para ingresar en la Academia Eclesiástica, donde se forman los embajadores vaticanos.
En la Pontificia Universidad Gregoriana obtuvo la licenciatura en derecho canónico. Ingresó al Servicio Diplomático de la Santa Sede en marzo de 1975, prestando servicio en las nunciaturas apostólicas de la República Dominicana y el Líbano.
En 1983 comenzó a trabajar en el Consejo para los Asuntos Públicos de la Iglesia, organismo vaticano del cual fue nombrado subsecretario en 1988. En 1990 ese organismo se convirtió en la Sección para las Relaciones con los Estados, una especie de ministerio de exteriores.
Desde entonces y por 13 años fue responsable de esa sección de la Secretaría de Estado del Vaticano, siendo consagrado obispo el 6 de enero de 1991 por san Juan Pablo II en la Basílica de San Pedro.
Como máximo responsable de exterior del Vaticano encabezó numerosas misiones diplomáticas y participó en otras tantas conferencias internacionales. El mismo pontífice polaco lo nombró cardenal en 2003.
En noviembre de 2003 fue designado Archivista y Bibliotecario de la Santa Iglesia Romana, en junio de 2007 Benedicto XVI lo designa presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso y en junio de 2013, Francisco lo pone a cargo de una comisión para la reforma del Instituto para las Obras de Religión, conocido coloquialmente como “banco del Vaticano”.
De 2011 a 2014 tuvo el puesto de cardenal protodiácono el cual, según el estricto protocolo vaticano, es responsable de anunciar la elección del nuevo papa tras el Cónclave con la famosa frase: “Annuntio vobis gaudium magnum… Habemus Papam”.
Fuente: Excélsior