Un grupo de paramilitares interceptó ayer a cuatro sacerdotes que se dirigían al municipio La Trinidad, en el norte de Nicaragua, donde se registró un enfrentamiento entre antimotines y manifestantes que bloquearon una vía.
Algunos sacerdotes de las parroquias intentamos acercarnos para dialogar, para evitar un enfrentamiento entre manifestantes y policías, pero al llegar cerca de La Trinidad los paramilitares nos impidieron el paso”, dijo el sacerdote Eugenio Rodríguez.
Eran como cinco armados, algunos encapuchados”, dijo Rodríguez, de la parroquia San Francisco de Asís de la ciudad de Estelí, está ubicada al norte de la capital.
El enfrentamiento dejó algunos heridos, según el padre, sin embargo dijo que los religiosos no fueron agredidos.
Personal del hospital de La Trinidad denunciaron que el centro fue rodeado por los armados, quienes impidieron que los heridos llegaran.
Rodríguez dijo que la policía les informó el lunes que tenían órdenes de “limpiar” bloqueo que los manifestantes levantaron sobre la carretera panamericana.
Explicó que los religiosos, en su función de mediación, comunicaron a los manifestantes los planes de la policía, pero se negaron a retirarse.
En tanto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) instaló ayer el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes para Nicaragua que investigará los hechos de violencia y las más de 200 muertes, según cifras oficiales, ocurridas desde que indicaron las protestas sociales en abril.
Mientras que la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) cifra el número de fallecidos en 309.
Fuente: Excélsior