El barco de la Organización No Gubernamental alemana Lifeline, con 234 inmigrantes a bordo, no ha podido atracar en Malta pese a que la víspera el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, anunció que el gobierno de la isla se lo permitiría.
Según confirmó la ONG en un comunicado, hasta esta madrugada la embarcación, que está por cumplir siete días en alta mar, no había recibido la autorización de La Valleta para entrar en sus puertos.
Alex Steier, fundador de la ONG, dijo que el problema es la negativa del ministro del Interior de Alemania, Horst Seehofer, al acuerdo por el que cinco países europeos se habrían comprometido a repartirse los inmigrantes a bordo de la nave.
Malta confirmó que abrirá sus puertos solamente cuando quedara claro cuales serán los países a los que irán los naufragos.
En tanto, el capitán del barco, Carl Peter Reisch dijo a través de Twitter que a bordo hay personas que necesitan urgente asistencia médica.
Asimismo, pidió permiso de poder, al menos, acercarse a las costas de la isla para protegerse del viento y de las altas olas.
La víspera, el primer ministro italiano anunció que, tras hablar con su par maltés, Joseph Muscat, la isla había autorizado a la Lifeline atracar en la isla.
Medios italianos aseguraron que el acuerdo habría sido alcanzado luego de que Conte y el presidente francés, Emmanuel Macron, se reunieran el lunes pasado en secreto en Roma para tratar el tema.
El mandatario francés ha sido duramente atacado por los líderes de la Liga, Matteo Salvini y del Movimiento 5 Estrellas, Luigi Di Maio (los dos partidos que gobiernan en alianza), por sus críticas a la decisión de Roma de impedir a barcos con imigrantes atracar en puertos italianos.
Macron estuvo esta semana en Roma para reunirse en el Vaticano con el Papa Francisco, pero no mantuvo encuentros oficiales con las autoridades italianas.
Fuente: Excélsior