Ante los señalamientos e incluso apodos que ha recibido del candidato Presidencial, Andrés Manuel López Obrador, el aspirante de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya, aseguró que no se engancha y que prefiere atender de manera seria las problemáticas que vive el país. El panista aseguró que bajo esa perspectiva es necesario ser más serios en torno al proceso electoral, ya que los índices de violencia e inseguridad en el territorio nacional “son insostenibles”. No me engancho. Hay que tomarnos en serio lo que vive el país. Son enormes los problemas y lo que está en juego es quién va a ser el presidente, entonces hay que tomar este asunto con más seriedad”, aseveró en entrevista con Francisco Zea.
Aseguró que el año pasado se convirtió en el periodo con más violencia en los últimos 20 años, mismo que continúa permeando en México, ya que se ha ido generalizando y ha ido al alza en la mayor parte de las entidades. Anaya Cortés detalló que para hacer frente a esta situación es necesario un cambio en la estrategia de seguridad y para ello él plantea dos puntos principales: la prevención: invertir en la cultura, el deporte y la educación para evitar que los jóvenes caigan en la delincuencia.
El segundo, la creación de una Secretaría de Seguridad Ciudadana “para que no sea un área política la que maneje los temas de seguridad”; duplicar el número de elementos de la Policía Federal, así como policías certificadas y bien pagadas. El candidato del Frente rechazó que la implementación de un Mando Único sea la opción para frenar la inseguridad en el país, por lo que considera que un Mando Mixto daría mejores resultados y para ello, los municipios y gobiernos locales deben tener la capacidad para una policía capacitada, bien pagada y certificada, de lo contrario, “el Estado se hará cargo”.
Al ser cuestionado sobre la Ley de Seguridad Interior, el panista destacó que presenta una falla en cuanto a la responsabilidad de los municipios y gobiernos locales con los elementos de seguridad. “Se debe de modificar, porque no da incentivos para que los gobiernos locales depuren, limpien, certifique y profesionalicen a sus policías. Qué cómodo que el Ejército y la Marina se hagan cargo de la seguridad, mientras que el Estado y el municipio no”, aseguró.
Fuente: Excelsior
