Nada da un aspecto tan negativo en casa como una grieta en la pared. Estas pueden aparecer por distintas razones y hacen que nuestro hogar se vea deteriorado y poco atractivo, pero no sólo esto, también pueden ser una señal de una situación mucho más seria, que va más allá de un aspecto estético. Las grietas pueden ser indicadoras de un problema estructural que puede poner en peligro la integridad estructural de tu casa. Hoy te vamos a platicar sobre cómo distinguir los distintos tipos de grietas y cómo repararlas. ¡Acompáñanos!
Causa de las grietas Las grietas pueden surgir por 4 causas principalmente. La primera es por una mala aplicación de acabado o un muro que no esté hecho a plomo, lo cual hace que el terminado de la pared se empiece a cuartear y se presente una grieta. La segunda causa es por el movimiento normal que presentan las estructuras dentro de la casa al momento de cargar y asentarse, lo cual crea un movimiento mínimo que puede hacer que aparezca una grieta. La tercera es algo muy común, sobre todo en casas viejas, donde las grietas aparecen por un exceso de humedad en la pared y, por último, la cuarta causa y la más peligrosa, es por una falla estructural, ya sea en cimentación o en estructura.
Tipos de grietas Las grietas, según su forma, nos pueden decir su origen o causa. Las grietas verticales, son por lo general causadas por una mala aplicación en acabados. Las que tienen forma de árbol o ramificaciones, son a causa de un exceso de humedad. Las grietas escalonadas, se forman a partir del asentamiento y movimiento natural de la estructura y paredes de la casa al asentarse y las grietas diagonales, las más peligrosas, son las que nos indican una falla o un problema grave estructural.
Reparando grietas Dependiendo del tipo de grieta, se aplicará una solución o estrategia según el problema. Para grietas verticales o ramificadas, basta con retirar el acabado existente, limpiar y secar bien el área a reparar y re-aplicar de forma correcta la mezcla, ya sea enjarre o acabado fino. Para grietas que sólo son superficiales, un poco de masilla reparadora es suficiente para corregirlas, obviamente aplicando el acabado o pintura una vez que quede asentada.
Fuente: Excelsior
