La decisión del gobierno del presidente Donald Trump de eliminar el estatus de protección temporal (TPS), que beneficia a 200 mil ciudadanos de El Salvador en Estados Unidos, pone a estas personas en peligro de muerte, destacó el grupo humanitario Amnistía Internacional (AI).
En un comunicado, la directora de defensoría de AI para las Américas, Marselha Goncalves Margerin, indicó que si los salvadoreños protegidos se ven obligados a abandonar Estados Unidos podrían enfrentar un grave peligro en su país de origen.
“El final de TPS para El Salvador es una traición devastadora para miles de familias que llegaron a Estados Unidos en busca de seguridad, así como también para sus hijos ciudadanos estadunidenses”, explicó Goncalves.
Añadió que si se “los obliga a regresar a El Salvador, las madres, los padres y los niños podrían enfrentar extorsiones, secuestros, servicios forzados a pandillas y violencia sexual. Al devolver a los receptores de TPS a El Salvador, Estados Unidos podría estar enviando personas a la muerte”.
El Salvador es un país afectado por altos niveles de violencia e inseguridad, con tasas de muertes violentas que en años recientes han sido más altas que en todos los países que sufren conflictos armados, excepto Siria.
Por su parte, la organización humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF), señaló que de acuerdo con sus encuestas y datos, 55 por ciento de los refugiados y migrantes salvadoreños informaron haber sido víctimas de chantaje o extorsión en su recorrido a Estados Unidos.
Asimismo, 56 por ciento tenían un pariente que murió por violencia y 67 por ciento dijeron que nunca se sintieron seguros en sus hogares en el Salvador.
Foto: Especial
Fuente: Notisistema
