A pesar de que California legalizará el uso recreativo de la marihuana a partir del 1 de enero, las autoridades federales seguirán incautando la droga y realizando arrestos en la frontera de ese estado con México. La posesión de marihuana será castigada en ocho puestos de control vial manejados por la Patrulla Fronteriza en California, prueba de que cuando se trata de la frontera, son las leyes federales las que privan. A nivel federal, la marihuana es considerada una sustancia controlada como la heroína o el LSD.
Antes y después del 1 de enero las cosas no cambiarán en lo que a nosotros respecta”, dijo Ryan Yamasaki, subdirector del sector San Diego de la Patrulla Fronteriza. «Somos una agencia de seguridad federal y por lo tanto estamos obligados a hacer cumplir las leyes federales”. Los puestos de control vial, algunos de los cuales están a 161 kilómetros de la frontera con México, son considerados la última barrera de defensa contra los migrantes que logran pasar la frontera clandestinamente. Pero también han servido para atrapar a ciudadanos estadounidenses con drogas, así sea con cantidades ínfimas de marihuana.
Un 40% de las confiscaciones de marihuana en los puestos de la Patrulla Fronteriza en los años fiscales desde el 2013 hasta el 2016 fueron de apenas 28 gramos (una onza), y estaban en manos de ciudadanos estadunidenses, según un reporte del gobierno emitido el mes pasado. La nueva ley en California permitirá a cualquier persona mayor de 21 años de edad portar un máximo de una onza del estupefaciente. La Patrulla Fronteriza opera 34 puestos de control vial permanentes a lo largo de la frontera con México y otros 103 “puestos tácticos”, es decir, simplemente con conos anaranjados y letreros que erige temporalmente.
Ronald Vitiello, subdirector del Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza, que supervisa a la Patrulla Fronteriza, calificó las confiscaciones de droga “un efecto secundario” de la lucha contra la inmigración ilegal. Los conductores con pequeñas cantidades de drogas son detenidos, retratados y fichados pero se les suelta poco después porque no se les considera una prioridad. La contradicción entre las leyes estatales y federales se hizo evidente a escala menor cerca de la frontera con Canadá cuando el estado Washington legalizó la marihuana en el 2014. Pero los puestos de fronterizos de California son mucho más transitados y contienen a muchos agentes más.
Fuente: Excelsior