El secretario de Estado norteamericano, Rex Tillerson, comentó que “provocan risa” los trascendidos de que la Casa Blanca quiere su renuncia. Provocan risa. Provocan risa”, expresó a la prensa cuando se le preguntó sobre declaraciones de altos funcionarios quienes dijeron que el presidente Donald Trump está pensando en destituirlo. Las mismas fuentes añadieron que el preferido del mandatario para reemplazarlo es el director de la CIA, Mike Pompeo.
Esas fueron las primeras y únicas palabras del jefe de la diplomacia estadunidense después de que ayer el diario The New York Times publicara, con fuentes anónimas, que el multimillonario quiere reemplazarlo. Esa información fue confirmada después, con fuentes propias también anónimas, por numerosos medios, entre ellos CNN o The Washington Post. Pero el funcionario siguió con su tarea diplomática este viernes en medio de un torbellino de rumores sobre su futuro.
Tillerson se reunió con el primer ministro de Libia, Fayez al-Sarraj, en el Departamento de Estado. El secretario preveía asistir a la reunión de Trump con al-Sarraj en la Casa Blanca y luego almorzar con el mandatario y el secretario de Defensa, Jim Mattis. Éste es un aliado de Tillerson en un gabinete donde son frecuentes las riñas, y el jueves declaró que los trascendidos sobre una renuncia inminente eran infundados. Al lado de al-Sarraj, Tillerson sonrió y trató de demostrar que los rumores no le preocupan; la semana próxima le espera un viaje oficial a Europa.
Fuente: Excelsior
