Las discusiones que sostienen algunas corrientes perredistas sobre el método de elección del candidato presidencial y el reparto de posiciones en el Congreso podrían derivar en un rechazo del PRD a integrarse al Frente Ciudadano por México junto con el PAN y Movimiento Ciudadano.
De acuerdo con fuentes de ese partido, en las mesas de negociación todavía existen posibilidades de que no se apruebe la alianza, e incluso acusaron que Alternativa Democrática Nacional (ADN) busca romper el Frente, tal como ocurrió en las elecciones pasadas en el Estado de México.
Paralelamente, la decisión de ir o no en alianza impactaría en la renovación de la dirigencia nacional perredista que está programada para el 9 de diciembre.
Si no hay alianza, la tribu mayoritaria de Nueva Izquierda no buscaría dirigir al PRD como signo de molestia e inconformidad, situación que se interpretaría como una ruptura dentro del partido.
Por su parte, Alejandra Barrales, lideresa perredista, dijo en Guadalajara que la coalición está fuerte y no se tambalea.
Con el Frente sí se están tambaleando, pero los que se están tambaleando son los del PRI, por eso están trabajando para tratar de desarticular. Nos está yendo bien y nos va a seguir yendo bien”, aseguró.
Rechazó que ya se hayan repartido diputaciones.
Excelsior