Salvar a Metrópolis y a la Ciudad Gótica de las garras de supervillanos debería ser presión suficiente para cualquier héroe, pero el equipo de la película Liga de la Justicia (Justice League) también se enfrenta a otro enemigo igualmente aterrador: los críticos cinematográficos.
La película es la entrega más reciente de los superhéroes de la casa editorial DC, una serie que, con la destacada excepción de la exitosa Wonder Woman de este año, ha recibido una respuesta crítica por debajo del suficiente y no pudo igualar en la taquilla a su rival Marvel.
El filme incluye a varios personajes importantes de DC y estrellas muy taquilleras como Ben Affleck en el papel de Batman, Gal Gadot como Wonder Woman, Jason Momoa como Aquaman y Ezra Miller como Flash.
Gadot tuvo una acogida positiva entre los críticos y en la taquilla por Wonder Woman, dirigida por Patty Jenkins, y afirma que la experiencia de esa película la ayudó a retomar el papel en Liga de la Justicia.
“Casi no tuve un periodo de transición desde ‘Wonder Woman’ porque terminé con ella y al día siguiente empecé a trabajar en ‘Liga de la Justicia’. Ya estaba en el papel”, dijo la actriz.
La predecesora de la película, el filme del 2016 Batman V Superman, recaudó poco más de 870 millones de dólares en la taquilla global, según la web Box Office Mojo, pero recibió una calificación del 27 por ciento en la página de crítica de cine Rotten Tomatoes.
Otra película reciente de la franquicia de DC, la de 2016 Escuadrón Suicida, también tuvo una respuesta pobre y recaudó unos 745 millones de dólares en la taquilla a nivel mundial.
Si bien ambos totales no son insignificantes, están lejos de los grandes éxitos de Marvel, Los Vengadores en 2012 y Los Vengadores: La Era de Ultrón en 2015, que recaudaron 1.500 millones de dólares y 1.400 millones, respectivamente.