George Clooney se vuelve a poner detrás de la cámara con «Suburbicon», cinta que coescribió con los hermanos Coen, y logra un filme agudo, divertido pero también dramático y oscuro. Interpretado por Julianne Moore, Matt Damon y Oscar Isaac, «Suburbicon» narra la historia de un apacible suburbio americano en donde todo es perfecto hasta que las cosas más terribles y desagradables ocurren.
Después de presentar a la prensa su nuevo filme, Clooney apareció en la Conferencia de Prensa del TIFF (Festival Internacional de Cine de Toronto) con su tradicional look de traje gris sin corbata rodeado de Moore y Damon. En él, las alfombras rojas, los flashes y reflectores parecen ser parte de su ADN pues siempre aparece sonriente y relajado como en esta ocasión. Una conversación con la prensa en la que las risas no faltaron pero en la que también estuvo presente la reflexión acerca de la situación que se vive actualmente en el mundo.
“Nunca me habían pedido hacer algo como esto, fue muy divertido interpretar a estos personajes. Además de Downsizing este fue otro guión que cuando lo leí dije, ‘¿De verdad vamos a hacer esto? Wow!’”, dijo Matt Damon entre risas y es que el personaje que interpreta es de lo más extremo e hilarante. Por su parte Julianne Moore agregó, “algo que amé del tono de esta película es que empieza siendo cómica y luego se convierte en un cine cada vez más negro y oscuro. Habla de gente mala que hace cosas muy malas”.
George Clooney creció en un suburbio de Kentucky y si sabe hablar de algo es de la vida en los suburbios y la hipocresía alrededor de ella, “yo crecí en un lugar así en los años 60 y 70 en donde la segregación existe, a veces ha estado más velada, a veces más expuesta, pero siempre ha estado ahí y cuando en el filme ves esta clase de fanatismo es como estar viendo otro Mississipi por citar algún ejemplo de las muchas ciudades en las que esto sucede”, explicó el director que también confesó que tuvo que cambiar muchas cosas que se habían filmado en la cinta al llegar a la sala de edición, “porque cuando estábamos filmando Trump fue elegido y el país estaba enojado y había otra temperatura de la que creíamos había cuando escribimos el guión, así que tuvimos que saber cómo darle otro tono. Tuvimos que cambiar muchos momentos y la música fue una pieza fundamental para darle ese tono. Porque aunque es una cinta hecha por nosotros no deja de ser una cinta de Paramount y en el mundo de los grandes estudios es muy difícil hacer una película con un final tan oscuro así que recibimos muchas notas del estudio pidiéndonos una versión más optimista y la música nos ayudó mucho a conseguir eso”, reconoció.
Al reflexionar acerca de la situación en el mundo en donde el racismo parece estar más exacerbado que nunca Matt Damon respondió, “parece que esta presidencia (se refiere a Trump) tiene una especie de reconfiguración de cómo habíamos vivido todo el tema del racismo. Inocentemente fui shockeado por los resultados electorales pero la verdad es que todo esto estaba ahí, hubo una guerra civil por esto y nunca llegamos al fondo del asunto y de la reflexión. Como sociedad decidimos pasar página y nunca dudamos que esto hubiera cambiado pero estaba aún ahí y tendremos que lidiar con esto hasta que realmente entendamos y analicemos el tema a profundidad”.
Según Clooney, es muy importante ver lo que está pasando en Houston e involucrarse, “tenemos que estar involucrados porque Houston es una ciudad en donde ahora la gente de ser parte de una sociedad pasó a ser refugiada, son víctimas a las que han sacado de sus casas y que van a sufrir por muchos años. Las personas tenemos que encontrar la forma de involucrarnos porque somos ciudadanos del mundo y no podemos dejar de ver esta situación. Todos somos responsables y todos tenemos que actuar”.
Lo más complicado para Clooney en este proyecto como director fue lograr escenas en donde los extras y actores tenían que hacer cosas sumamente desagradables de racismo, “estábamos filmando con cientos de extras en un barrio de California que es uno de los más diversos en cuanto razas y creencias y teníamos que ponerlos a hacer cosas horribles, que a la hora de filmar eran desagradables y enfermas. Estar en esos momentos y poner a la gente en esa situación es una de las cosas más complejas de conseguir”, compartió para después provocar las risas al responder con ironía la pregunta de un periodista acerca de si Matt Damon siempre fue su primera opción como protagonista, “Digamos que Matt era el mejor disponible (risas)”. Del por qué decidió no protagonizar él mismo la cinta dijo, “tengo el beneficio de tener a tres maravillosos actores que me permiten centrarme en el tono de la película pues sé que ellos bordarán sus actuaciones. Además cuando lo hacen mal te puedes enojar porque eres el director y listo”, finalizó.