Quiero creer que la gente ha aceptado que la grasa no es el enemigo. En todo caso, los investigadores han demostrado y confirmado los tantos beneficios del consumo de grasas. En otras palabras, hay que comer grasas buenas para que el cuerpo pueda tener la energía suficiente para eliminar las grasas no saludables.
Sin embargo, hay una dieta que lleva el concepto un paso más allá. A esta dieta se le llama“cetogénica” o “keto.” Y aunque ha existido por ya bastante tiempo, hasta hace poco recuperó su popularidad, especialmente entre mujeres que buscan la tonificación de músculos.
Así es como funciona: Tienes que comer cantidades grandes de grasa (hasta el 75% de las calorías del día), nada de carbohidratos (menos de 20 gramos) y tu cuerpo entrará a una fase llamada “ketosis,” donde produce ketones. En lugar de apoyarse en la glucosa de los carbohidratos para tener energía y actividad cerebral, tu cuerpo usará ketones para quemar grasa.
Aunque no es recomendable cortar los carbohidratos por completo (porque habrá menos energía), hay investigaciones que demuestran que la dieta keto es buenísima para maximizar el tiempo para tonificar y construir músculo.
Un estudio reciente publicado por el Diario de Deportes y Medicina, descubrió que después de 8 semanas de entrenamiento de resistencia, y una dieta baja en carbohidratos, la gente obtenía los mismos resultados en fuerza que aquellos que llevaban una dieta alta en carbs. Esto sucede porque la falta de carbohidratos no tiene efectos perjudiciales en el desempeño durante entrenamientos.
Varios estudios también han demostrado que combinar el entrenamiento de resistencia con una dieta cetogénica puede ayudar a los dietistas a mantener masa muscular y perder grasa corporal.
Se escucha como la dieta perfecta, ¿no? Pero viene con advertencias: Primero, puede tomar de 2 a 4 semanas para que el cuerpo se ajuste y entre la fase de ketosis, así que la paciencia es clave. En segundo, es increíblemente importante que no comas casi ningún carbohidrato, con la excepción de que venga de vegetales. Necesitas vaciar prácticamente todo tu cuerpo de carbohidratos para entrar a esta fase. Y si no entras a a esta fase Y no tienes suficientes carbohidratos, no sólo no perderás grasa, sino que estarás hambrienta y de mal humor.
Así que evita contar tus calorías (lo cual puede asustarte cuando la dieta consista de grasas saludables) y ponte a contar los carbohidratos.
FOTO: Especial
FUENTE: Eme de Mujer