Además de su popularidad en los años 90 tras protagonizar películas de acción como «Difícil de matar» (1990) y «Alerta máxima» (1992), el actor Steven Seagal ha hecho notorio su apoyo al gobierno de Vladimir Putin en Rusia.
Sin embargo, no toda la región de Europa del Este mantiene una buena relación con la ex figura de Hollywood. Según constató el sitio inglés The Guardian, el servicio de seguridad de Ucrania prohibió la entrada del intérprete por los próximos cinco años.
El ingreso a la «lista negra» del Estado se debe (según una carta publicada por la entidad) a que el actor «cometió acciones sociales peligrosas que se contradicen con el interés de mantener» al país seguro.
El comunicado no especificaba los motivos que provocaron la medida. Hace tres años, Seagal participó de un rally deportivo en la península de Crimea —región ucraniana que en 2014 fue anexada a Rusia, lo que desató una crisis diplomática entre ambos países—, donde mostró su apoyo hacia Putin.
La cercanía con el Kremlin, desde que aseguró públicamente que el mandatario era «uno de los más grandes líderes mundiales», ha beneficiado al actor en varios aspectos . En 2016 recibió la ciudadanía y un pasaporte ruso de manos del propio Vladimir Putin.