El Rebaño llegó a su cuarto título de copa al derrotar a La Monarquía en los cobros desde los once pasos
Si no hay sufrimiento parece que a Chivas no le gusta ganar. Guadalajara es Campeón de la Copa MX por cuarta ocasión en la historia, y fue gracias a los penaltis que paró el portero Miguel Jiménez, quien se vistió de héroe al atajar tres disparos.
A Jiménez le salieron una capa y poderes mágicos para darle al Rebaño el título de Copa cundo esta parecía estar perdida cuando Carlos Salcido falló el primer disparo de la tanda rojiblanca. El Rebaño vino de atrás y como dice el dicho ‘caballo que alcanza gana’.
Los de Matías Almeyda son el ‘Rey de Copas’ desde que volvió el torneo al futbol mexicano, Chivas se puede jactar de ser el único equipo que la ha levantado en dos ocasiones y además pueden presumir ya el haber alcanzado al América con 37 títulos. Guadalajara empieza a recuperar la memoria de ser un equipo ganador.
Chivas fue infinitamente superior a Morelia en el tiempo regular. Los michoacanos nunca mostraron ganas de querer ser campeones y el Rebaño sí, pero en el futbol no basta con mostrar ganas y eso lo entendieron los rojiblancos a la hora de tirar los penaltis.
Más de uno imaginó que el Guadalajara sería campeón desde antes de que se jugará el partido, pero los encuentros hay que disputarlos y la diosa fortuna también fue factor.
Chivas sufrió muchísimo en Guadalajara, el gol se les negó durante el tiempo regular. Sebastián Sosa les hizo la vida de cuadritos a los delanteros y cada tiro que tenía la etiqueta de gol lo desvió. El partido fue difícil, pero su historia y grandeza salieron a relucir cuando todo parecía perdido.
Ni la desesperación por anotar, ni la obligación de ganar mataron al Guadalajara, desde que Almeyda tomó el equipo ha demostrado coraje para salir de las situaciones complicadas.
Dicen que los cobros desde los once pasos son un volado, pero Jiménez demostró que para plantarse bajo los tres palos también hay que estudiar al rival. Antes de los cobros el cancerbero recibió un papel por parte de cuerpo técnico para que supiera hacia donde tiraban los jugadores de Monarcas.
La apuesta le salió a Chivas, el Rebaño puede soñar, el título de Copa era el envión que faltaba para el cierre de torneo, sellar el pase a la Liguilla y porque no, pensar en el doblete.
Fuente: Record
