“Un jardín botánico es un museo vivo, se basa en una colección de plantas vivas bien identificadas, eso nos hace diferentes de un jardín cualquiera o de un parque”, señala Marco Gómez.
El jardín botánico de Puerto Vallarta, con ocho hectáreas de terreno, fue nombrado Jardín Internacional de la Paz 2017, por un comité internacional que analiza las situaciones que viven diferentes países y decide mediante la Fundación Internacional del Jardín de la Paz, quién será el elegido.
En la actualidad existen 22 Jardines de la Paz en los cinco continentes y México es el segundo país en Latinoamérica en recibir este honor.
Marcos Gómez, encargado de los proyectos del lugar aseguró a Crónica que el nombramiento tiene mucha importancia: “Solamente se elige a un jardín por nación, la Fundación de Jardín Internacional de la paz tiene un comité y analizan la situación de diferentes países, y México ha sido un lugar en donde se recibe a los refugiados de guerra, abre las puertas a todos los visitantes, somos incluyentes, fue por eso que esta organización decidió que aquí se designara el Jardín de la paz, decidieron que Vallarta es la zona más pacífica”.
El Jardín Botánico de Puerto Vallarta es el único en el país que tiene la misión de la conservación de orquídeas, Gómez, aseguró: “Tenemos dos proyectos principales, el de orquídeas y el de magnolias; de orquídeas en el país hay alrededor de 1250 especies y en el mundo hay alrededor de 5 mil, aunque no lo parezca es la segunda familia más diversa que hay en el planeta, hay en todos lados; en México hay varias especies en peligro de extinción y en el conservatorio intentamos integrar estas especies y en el laboratorio que tenemos estamos tratando de conservarlas antes de que se pierdan en el medio ambiente”.
El otro proyecto es el de las magnolias, entre el 2015 y el 2016 se descubrieron siete especies de magnolias nuevas para la ciencia solamente en México, “como la Magnolia Vallartense, solamente habita en el área de Vallarta. De esta planta hay alrededor de 35 especies, son las primeras plantas con flores que aparecieron en el planeta, los dinosaurios comían flores de magnolia”.
También se ha descubierto que son medicinales, ya que se ha comprobado que los pétalos de magnolia en una infusión o en un té ayudan a bajar la presión, también producen pesticidas orgánicos, además cuando son polinizadas producen calor.
“Nosotros buscamos todas las orquídeas que están en flor y las polinizo, hay otras que vienen de otras partes del país, y los insectos que las polinizan no existen aquí, así que yo tengo que ir una por una, a ayudarle a reproducir, tenemos una cápsula que tiene las semillas y las llevamos al laboratorio y las ponemos con todos los nutrientes que necesitan, y al sacar unas dos mil semillas van y se dispersan en la naturaleza, lo que tratamos de sacar la mayor cantidad de semillas, este jardín botánico es uno de los únicos que tienen un laboratorio in vitro”.
Marcos Gómez, quien se encuentra totalmente comprometido con el recinto explicó, “un jardín botánico es un museo vivo, se basa en una colección de plantas vivas bien identificadas, eso nos hace diferentes de un jardín cualquiera o de un parque, aquí hacemos investigación biológica para saber cómo propagarlas”.
“Es, de todos los jardines del país, el número uno en paisajismo, es decir, la relación entre la arquitectura y la exhibición de plantas, además de que busca recrear el caos que vemos en la naturaleza, como podemos ver hay orquídeas, helechos, hay de todo un poco, es como está en la naturaleza”.
CONSERVACIÓN. Emiliano Sánchez Martínez, presidente de la Asociación Mexicana de Jardines Botánicos, aseguró que se encuentran trabajando en la conservación de estas zonas que son importantes para el país, “pertenecemos a un circuito internacional de jardines botánicos, los de México ya tienen una gran relevancia, son 22 consejeros en el mundo que se encargan de la conservación, yo soy uno de ellos”.
Sánchez Martínez aseguró: “Los jardines botánicos en México fueron de los primeros que se hicieron en el siglo XVIII, pero la propagación y difusión se hizo hasta el siglo XIX, aún así al día de hoy tenemos registrados en la asociación 40 alrededor del país, aunque la Semarnat tiene en sus documentados registrados 100”.
Estructura. El nuevo Jardín de la Paz Cheryl L Wheeler (quien es la benefactora principal de la conservación del lugar) adorna la pendiente que se eleva hacia la entrada de la recientemente terminada capilla de fe múltiple, Nuestra Señora del Jardín, la cual contará con plantas del Mediterráneo y Tierra Sagrada, acompañadas de flores silvestres mexicanas. Además se sembrarán tulipanes, flores que son conocidas como de paz.
Foto:Especial
Fuente: Crónica
