El fenómeno se podrá observar a partir de las 18:00 y durará varias horas; posteriormente, un cometa también hará su aparición en el cielo
Este fin de semana el cielo será escenario de dos fenómenos: un eclipse lunar y el paso de un cometa.
El viernes, la Luna pasará por la penumbra de la Tierra, o sombra parcial. El satélite natural no se oscurecerá totalmente como en un eclipse total, sino solo una parte, y podrá verse desde la mayor parte del planeta, excepto en el extremo oriente de Asia y Oceanía.
La coincidencia entre la Luna, el Sol y la Tierra hará que esta última se interponga entre los dos primeros, proyectando una sombra a través de la superficie de nuestro satélite natural, por lo que sólo se verá la sombra externa más difusa de la Tierra caer sobre la Luna, provocando una sombra más sutil que un eclipse total o parcial como los que acostumbramos a ver.
La investigadora del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Gloria Delgado, explicó que “si a uno no le dicen que va a haber un eclipse de Luna penumbral, pasaría como por un día normal porque es muy poco lo que se oscurece, de modo que este eclipse que sí se podrá apreciar en México no va a ser tan espectacular”.
Sin embargo, afirmó que los curiosos podrán utilizar cámaras profesionales y apuntar hacia el cielo a partir de las 18:00 horas, justo cuando comenzará a oscurecer, para tratar de observar el acontecimiento que durará más de tres horas.
La académica aseguró que, al tratarse de un eclipse lunar, el fenómeno no perjudicará de ninguna manera la salud o la vista de los seres humanos, por lo que podrá ser apreciado por personas de todas las edades.
Este año ocurrirán cuatro eclipses; dos de Sol y dos de Luna, y el segundo ocurrirá el 26 de febrero y será de Sol Anular; el tercero, que será parcial de Luna, el 15 de agosto, mientras que el cuarto será total de Sol y podrá apreciarse el 21 de agosto.
De ellos, solo se podrán observar el de este 10 de febrero y el del 21 de agosto por la posición del planeta.
Por otra parte, el sábado, apenas unas horas más tarde, el cometa 45P – también conocido como el cometa de Año Nuevo – hará su acercamiento más próximo a la Tierra. Será visible en el cielo de la mañana en la constelación de Hércules, antes de pasar por las constelaciones Corona Borealis (la Corona del Norte), Boötes (el Pastor), Canes Venatici y Ursa Major.
El cometa, de un resplandor verde, podrá verse en la constelación Hércules. Los binoculares y los telescopios serán de mucha utilidad.
La red de observatorios Slooh transmitirá en vivo ambos eventos desde las Islas Canarias.
Fuente: Excélsior