La cantante se siente feliz y agradecida de poder anunciar que su sobrina Maddie, de ocho años, está mostrando progreso tras el accidente que sufrió el domingo.
Para la cantante Britney Spears habrá supuesto sin duda una gran alegría poder anunciar a todos sus fans que su sobrina de ocho años Maddie, la única hija de su hermana pequeña Jamie Lynn, comienza a recuperarse poco a poco después de unos días marcados por la tensión y el miedo a que la vida de la pequeña corriera peligro tras sufrir un accidente el pasado fin de semana.
«Nos sentimos muy agradecidos de poder anunciar que Maddie ya está teniendo progresos. Muchas gracias a todos por enviarnos su cariño y oraciones. Sigamos rezando», compartió la princesa del pop en su cuenta de Instagram.
La estrella de la música fue uno de los primeros miembros de su familia en pronunciarse acerca del trágico suceso, para confirmar que Maddie estaba ingresada en el hospital después de que el pequeño vehículo todoterreno con el que estaba jugando en la finca de su casa se precipitara a un lago y ella quedara atrapada dentro durante dos minutos.
Afortunadamente, un portavoz de los Spears confirmó ayer miércoles que la niña había recuperado la conciencia y ya no necesitaba respiración asistida -aunque los médicos continuaban suministrándole oxígeno-, además de revelar que todo apuntaba a que no habría sufrido daños neurológicos a consecuencia del tiempo que permaneció sumergida bajo el agua.
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FUENTE: QUIÉN
