Luego de que la convocatoria en redes sociales expandiera la lista de invitados para los XV años de Rubí, el evento realizado en las comunidades de Laguna Seca y las Charcas, recibió a unas 20 mil personas, quienes disfrutaron de un mega baile amenizado principalmente por grupos de música banda.
Al ritmo de la música de banda, los invitados a la celebración de la quinceañera más famosa de México sacaron sus mejores pasos de baile para comenzar a calentar el cuerpo durante lo que será una noche larga.
Rubí Ibarra, lució un pomposo vestido de falda fucsia con un llamativo corset bordado y una brillante diadema, sin embargo, no podía ocultar su angustia, apenas podía caminar, mientras su familia le abría paso entre decenas de fotógrafos que querían inmortalizar su llegada a la misa con motivo de su especial celebración.
LA MISA
Sólo unas 300 personas habían acudido a la cita por la mañana, cuando tuvo lugar la misa, pero por la tarde el número se multiplicó y al caer la noche los coches atascaban la entrada a la comunidad con lo que los asistentes pudieron superar los 10 mil y el ambiente era similar al de un gran festival de rock.
En el lugar había rancheros del lugar, curiosos procedentes hasta de Luisiana, Estados Unidos, que estaban de vacaciones en México o motociclistas que llegaron de Ciudad de México en sus Harley-Davidson «a pasear» mientras las televisoras —incluso las internacionales— buscaban a los artífices del gran pastel o entrevistaban al maquillador o al coreógrafo de la quinceañera para no perderse un detalle del festejo que durante varias semanas dio lugar a «memes» irónicos, promociones especiales de empresas grandes y pequeñas —incluidas algunas falsas— y felicitaciones de famosos y políticos.
LA FIESTA, COMO FESTIVAL DE MÚSICA…
El baile de los XV años de Rubí Ibarra, que se realiza en un predio de la comunidad de Laguna Seca, en este municipio, fue abierto por la Banda Jerez.
«Bienvenidos a mi fiesta de XV años», decía un gigantesco cartel con la foto de la niña en la explanada donde se habían instalado carpas, mesas decoradas en rosa, fucsia y blanco, junto a casetas de baños públicos, instalados para la ocasión.
Las vías de acceso a la comunidad, una zona de rancherías y donde también hay una destilería de mezcal, se llenaron de coches y autobuses mientras la policía estatal se encargaba de las labores de seguridad y la Cruz Roja o Protección Civilestaban en alerta ante cualquier incidente.
El momento más emotivo de la noche, fue el vals…
Los vecinos del lugar no dejaban de sorprenderse por la gran atención que acaparó la fiesta y confiaban en que, a la larga, se tradujera en mejoras para la comunidad, como que llegara la señal de telefonía celular.
Sin embargo, hay quien no desperdiciaba el momento para vender sus productos, desde tarjetas para conexión wi-fi hasta adelgazantes, mientras algunos declaraban, alto y claro, lo que esperaban de la fiesta:
Vengo a ver si me regalan un vestido para mi nieta que cumple quince años el próximo mayo», dijo Victoriano Obregón, que llegaba del norteño estado de Coahuila.