¡Dale, dale, dale, rompe la piñata!
En esta Navidad continúa las tradiciones mexicanas, y es que no solo las de picos, también encontrarás las de personajes de la farándula y hasta políticos, gracias a las manos y el ingenio de artesanos queretanos.
Dicen algunos que la piñata es el diablo y sus picos los pecados… y el vendarte los ojos y pegarle, representa la fe para vencer al mal.
Esta tradición religiosa acompaña las posadas de la Navidad, uniendo a chicos y grandes, y es que no hay posadas sino hay dulces, y no hay dulces si no hay piñata.
Elizabeth Briseño, lleva trabajando la realización de piñatas aproximadamente 10 años en el estado de Querétaro, pero no se trata solo de piñatas, sino de piñatas fuera de lo tradicional…
Con formas que van desde de personajes de películas de moda, súper héroes y las tradicionales navideñas, hasta los personajes de la farándula y los de la política, esta artesana sorprende a los clientes, o más bien los clientes la sorprenden a ella, ya que refiere que hay quienes le solicitan hacer piñatas de sin fin de formas.
«La inicial fue la de El Chapo, y fue debido a que un cliente lo vio en la televisión, que vio un señor que hacía en Aguascalientes, y dijo -usted es fabricante, -si sí, lo somos… -a pues hágame una de El Chapo… A raíz de que salió del túnel y se hizo famoso…»
En su tienda, la cual se ubica en Avenida Tecnológico 38, norte, casi esquina con Hidalgo, Elizabeth cuenta con piñatas desde la de El Chapo, hasta la de Marcos Aguilar, Pancho Domínguez, e incluso Peña Nieto y Donald Trump.
«Nosotros, ya con la demanda, estamos viendo quien está en el ojo del huracán, y es lo que estamos trabajando. Se las llevan y pasan y como si fuera algo simbólico, pasan y se toman la foto… Por ejemplo, ya tenemos a Marcos Aguilar, Peña Nieto, Donald Trump, Kim Kardashian…»
La originalidad del trabajo ha permitido que el negocio crezca, y que incluso en Navidad, los clientes adquieran además de las piñatas típicas de tres, cinco y siete picos, también las de parodia.
«Piden cosas bien raras, a mí lo que me simpatiza son los chicos del ITQ que cada año para su bienvenida de Mecánica piden sus mojigangas, son personajes de sus profesores, y les dan con muchas ganas…»
Y debido al trabajo e inspiración que cada piñata demanda, oscilan entre los 450 y 500 pesos, algunas teniendo un tamaño de 1.20 metros.
La realización de la piñata tarda hasta 10 días, entre la construcción de la base, el recubrimiento con papel periódico, el secado, y la aplicación de la pintura.
Sin embargo, Eli comenta que cada una está hecha con inspiración, pues el moldeado y la pintada es como una terapia.
«Generalmente según el personaje, pues no todas quedan en una sola medida, hay unas de un metro, o metro medio, manejamos la mediana, la económica que va cubierta de papel china, para ayudar al cliente. También trabajamos los cabezones…
…Lo más difícil es darle forma, lo que más me gusta a mí es pintarlas, es como una terapia…»
Y aunque a veces tiene ayuda de sus hijos, es ella quien mantiene vivo este negocio, habiendo comenzado con ocho moldes y ahora ya contando con 25 e incluso con otra sucursal en Santa Rosa Jáuregui.
La venta siempre es variable, pero cada vez más incrementa, principalmente en época decembrinas.
Y es que la piñata es un regalo original para convivir en familia o con los amigos.Así que en esta Navidad y Año Nuevo, recuerda llevar la tuya a casa.
Por: Ivet Hernández
