En lo que va del año se han presentado más de 86 robos al transporte público en la zona metropolitana, principalmente en la zona norponiente y en algunos se reporta uso de armas blancas y de fuego.
Ante el alza de estos incidentes, la ciudadanía se siente insegura al viajar en las unidades que se dirigen hacia las colonias de Loarca, San Pedrito Peñuelas, Satelite, Lomas de Casa Blanca, solo por mencionar algunas, por lo que piden a las autoridades mayores operativos en las zonas de ascenso y descenso, así como en interior de las unidades.
“Pues te da miedo de que te vayan a asaltar, si vas con niños que les vaya a pasar algo, que te vayan a quitar tu bolsa, las personas que vamos solas que te vayan a asaltar con algún instrumento que te dañe”, comenta un usuario del transporte público.
“Yo viajo de aquí a la zona de Sendero y tomo la ruta 36, la “F”, o la 50. Bueno a mí no me ha tocado ningún asalto pero por familiares si he sabido que han asaltado mucho en la ruta 50, pero te digo que a mí no me ha pasado ningún incidente de ese tipo, pero por lo que veo si hay falta de seguridad”, comenta otro usuario.
Un padre de familia describió el incidente que sufrió uno de sus hijos a plena luz del día, cuando se dirigía a la escuela en la ruta “50-A”, por lo que ahora viajan con el temor de que se vuelva a repetir:
“A mí hijo lo asaltaron a las 6 de la mañana en la ruta “50-A”, entonces yo pienso que las autoridades o los policías si deben de trabajar un poco más temprano en las rutas. Le quitaron efectivo y un celular”
En esta ocasión nos subimos a la ruta 81, la cual parte desde la colonia Satélite y concluye en Lázaro Cárdenas; platicamos con el operador, Víctor Sánchez López, quien reveló que anteriormente conducía la ruta “51-B” y donde en una vez sufrió un intento asalto en la colonia Lomas de Casa Blanca, pero no fue despojado de sus pertenencias.
“De hecho yo los agarré (a los asaltantes) y al último nada más me desvelé, de nada sirvió, los soltaron. Pues de hecho fue temprano, esa vez me tocó venir del Rancho de San Pedro que eran como a las 8:20 de la noche y se subieron los chavos ahí en el molino y ya cuando nos quedamos solos fue cuando se pararon con un cuchillo y haz de cuenta que me tocó suerte porque estaba un taquero y me pegué ahí con el taquero y pegué el autobús con los carros y no se podían salir tampoco”, señaló.
El operador dijo que normalmente ellos cargan cerca de dos mil pesos de la cuenta y más allá del dinero, temen por su vida y también por la integridad de los usuarios, los cuales también son víctimas de los delincuentes.
En cuanto a los operativos que realizan policías municipales, dijo que se tienen que implementar en zonas donde han sucedido los incidentes, ya que señala que los ha observado en algunas donde no representa riesgo para la ciudadanía.
“Pues es que han hecho sus operativos, pero yo veo que en un lugar adecuado, a nosotros nos paran y nos piden la tarjeta de circulación y nos piden la licencia, pero yo no veo ningún beneficio que se vaya corregir la inseguridad”, señaló.
En este sentido, el titular del Instituto Queretano del Transporte, Alejandro López Franco, dijo que ya se trabaja en operativos con policías de los municipios de Corregidora, Querétaro y El Marqués, en donde elementos uniformados o de civiles suben a las unidades para atender cualquier situación que ponga en riesgo la seguridad de los usuarios y el conductor, pero si resaltó que tanto los chóferes, como la ciudadanía en general debe denunciar en caso de ser víctima de estos delitos.
“Ya tenemos algunos operativos donde se suben oficiales y hacen el recorrido de la unidad, tanto uniformados, como encubiertos; hasta el momento no hemos tenido resultado de uno de estos operativos, porque obviamente cuando son uniformados se inhibe la actuación de estas personas”, comentó.
Además dijo que en total se cuenta con más de mil cámaras instaladas en las unidades, pero de las cuales sólo funcionan el 16%, por lo que se analiza si son las adecuadas o se deben de cambiar para tener un mayor alcance y registro de lo sucedido en el interior de la unidad y con ello se pueda actuar de inmediato ante cualquier incidente.
“El 16% de las videocámaras que el estado proveyó para las unidades son las que funcionan, estamos hablando de mil cien aproximadamente. Estamos estudiando si las cámaras que están fueron las adecuadas para el uso que se les dio y cual pudiera ser la mejor alternativa”, finalizó.
Por: Luis Arturo Pérez