La británica asegura que disfruta tomar el control de sus discos y trabajar con gente que la inspire musicalmente, como sucedió con Rihanna, Selena Gómez, Gwen Stefani, Katy Perry e Iggy Azalea.
¿Trabajar con un productor que asegure millones de canciones vendidas? Eso no va con la rebeldía de Charli XCX.
Por su propio mérito y alianzas, la británica de 24 años compuso junto a Icona Pop el éxito del verano de 2013 I Love It, rompió un año después con el sencillo Boom Clap (de su álbum debut True Romance) que vendió un millón de copias en Estados Unidos y eso bastó para que los fenómenos comerciales como Selena Gómez, Gwen Stefani, Rihanna, Katy Perry e Iggy Azalea, entre otras, consiguieran trabajar con ella.
“Pasa que jamás he tratado de ser la copia de la otra, ni intentar hacer esas cosas de trabajar con la gente que hace los éxitos del año, tampoco de estar involucrada con los responsables de armar el Top 40 ni que me digan ‘debes trabajar con ese productor que siempre hace hits’. ¡Claro que no!
“Lo que disfruto es tener el control de mis propios discos, arreglar mis propias cosas, unirme con gente que me inspire realmente para crear música, como todos los que han hecho grandes cosas en el mundo underground, prefiero crear algo con ellos antes que con los grandes mentirosos del mundo del pop comercial. Al final, siempre resulta algo que rompe con lo convencional y con esos tops que tanta importancia les han acreditado”, declaro en una entrevista.
Mejor ejemplo reciente para sostener sus argumentos no hay que su nuevo sencillo After the afterparty. Primero, trabajó con el novato rapero Lil Yatchy de 19; y segunda, sólo buscó una excusa para divertirse en 2017 con el lanzamiento de su tercer material, programado para mayo.
Aunque ella quisiera que fuera antes, pero se atiene a la decisión de su compañía.
“Ésta fue la última canción que compuse para el disco. Cuando la escribí pensé en ella como la escandalosa gran canción popera de todos los tiempos, sin pretensiones; esas rolas son importantes para mí y las que me gusta escuchar todo el día.
“Sí me gusta lo emocional, pero me he concentrado en crear mis más grandes producciones de pop agresivo y así tener la excusa de beber mucha champaña durante las partes de mi vida que esté de promoción”, explicó.
Sophie, un productor escocés inspirado en la cultura pop y completamente separado de la gastada formula EDM (música electrónica comercial), es nuevamente su aliado, pues a principios de año trabajaron en el disco Vroom Vroom EP, la introducción de Vroom Vroom Recordings, sello independiente de la cantante.
“Crecí en los raves que se organizan en almacenes de Reino Unido, donde nació esa escena; cuando era más joven hice ese tipo de shows y toqué en esas fiestas. Ahora quiero capturar todo ese movimiento ochentero, noventero, pero no deseo tener una copia.
“Así que cuando descubrí a Sophie sentí una conexión, porque te lleva a esos momentos, es reventón para mandar todo al carajo y enloquecer, es cool sin la necesidad de reproducir fielmente o unirse a lo tradicional (como el EDM)”, agregó.
Su ideal por estar fuera del pop comercial la llevó a abrir su propia disquera en febrero. Ahí quiere experimentar con el pop más underground, con chicos y chicas que la inspiren; ser autosuficiente y no esperar los tiempos de una compañía.
“Es más para beneficio mío que para otros, ahí puedo trabajar sin fechas y hacerlo en el momento que quiera. Sin embargo, entiendo perfectamente el método de las grandes disqueras y lo respeto. Rápidamente he firmado a CuckooLander, que está haciendo cosas bastante experimentales y trabajaremos con ella todo 2017”, dijo.
Su inquietud la llevó también a dirigir y estelarizar el documental The F Word and Me, una producción para la BBC que toca el punto de vista de la británica sobre el feminismo actual y la situación de la mujer en la escena musical.
Liz, Marina and the Diamonds y Ryn Weaver, entre otras colegas que topó en su participación en Glastonbury y Lollapalooza del año pasado, también aportan su punto de vista.
“El que la mujer domine la parte del espectáculo es sólo un hecho, desafortunadamente cuando vas a eventos de la industria musical descubres que la mayoría de gente que trabaja para ellos son hombres, los directores también lo son. Divido mi tiempo viviendo en Inglaterra y en Los Ángeles; tengo la fortuna de que en Estados Unidos trabajo con subsellos dirigidos por mujeres tan fregonas como los del sexo masculino.
“Con el documental me di cuenta de que todas tenemos que ser autosuficientes y que en la actualidad se sigue creyendo que el sexo vende música más que talento; Rihanna no entra aquí porque ella es de las chicas que hacen lo que se les dé su gana. Si un día quiere dejar de ser provocativa, lo será”, expuso.
Conócela
- Su nombre real es Charlotte Emma Aitchison.
- Nació el 2 de agosto de 1992 en Cambridge, Reino Unido.
- A los 14 años comenzó a componer y a subir sus rolas a MySpace.
- Sus primeras tocadas fueron fiestas ilegales en almacenes al este de Londres.
- Se llama Charli XCX por su nickname en el MSN Messenger.
- Ha sido galardonada por la revista especializada New Musical Express y por los Billboard por su canción Fancy junto a Iggy Azalea.
- Tiene su propio show de radio en Beats 1.
Fuente: Excélsior