Como es costumbre, Lila Downs sorprendió al público que llenó el Auditorio Nacional, con imágenes prehispánicas, atuendos autóctonos y música de orquesta y un enorme altar de muertos que colocó en el extremo derecho del escenario, de donde se abastecía de accesorios vistosos para su espectáculo.
Arrancó la ovación con la letra hablada del tema «Humito de copal», mismo que interpretó ataviada con un penacho con plumas de faisán, un estraple con estampado de jaguar y una falsa con imágenes aztecas, detalle que el público celebró con los rostros pintados con la imagen de la calavera.
«Qué dicen las calaveras esta noche, venerar en estos días a la muerte, en que los vivos veneramos a nuestros muertos. Cómo vamos a vivir, se los pregunto y los invito a un recorrido al inframundo, como el Tlacuache, el único que lleva a los muertos», indicó para luego cantar «La Iguana».
Lila Downs además de parodiar al político Donald Trump, a través de una representación teatral, abordó las formas de llegar al inframundo, dependiendo de cómo llega la muerte, desde morir en la guerra, pasando por el parto dando a luz y ahogado.
«Muerte a los corruptos y asesinos de mujeres, que cada tres horas matan a una en México, para luego interpretar «El preso número 9» y «La reina del Inframundo». La representación del diablo y el tlacuache, con dos actores dieron pie al siguiente tema, «Me fallaste corazón», de Cuco Sánchez.
Lila Downs, afirmó que México es el país, que más alimentos a dado al Mundo, para dar pie al tema «Balas y cacao», con la que rindió tributo a los campesinos y al campo mexicano, y ceder con ello el escenario al Trío Corona de la Huasteca, que hizo sonar unos huapangos, mientras Lila Downs cambiaba de atuendo.
La también antropóloga salió, con un vestido tricolor muy mexicano y a ritmo de tambora, interpretó los temas «Cruz de madera», «La Martiniana», «El Feo», «La mentira», «Patria madrina», «Viene la muerte», «Mano negra» y «Se te olvida», está última con la que rompió su lista de canciones, recordando con ello al prolífico compositor, Álvaro Carrillo.
El concierto maduró e inició la recta final, con la presentación del grupo de Amilkar Jiménez y las Marimbas Yetzi Querio, de Ixtlán de Juárez, Oaxaca, mientras ella hacia su tercer cambio de atuendo, para dar paso a la recta final de su recital y rendir homenaje a las mujeres indígenas, como su madre presente en el Auditorio Nacional, al cantar, «La Llorona».
Lila Downs, hizo cantar al público de Coloso del Paseo de la Reforma con el tema, «Zapata se queda», «Cruz de olvido» y «El son de los difuntos», para luego interpretar el Mezcalillo y lucir los atuendos creados por la coreógrafa Jesusa Rodríguez.
«Ha llegado el momento de recordar a alguien querido por nosotros y seguro ya está en el Tlalolcan y nos ha de estar esperando, Juan Gabriel», para luego cantar:»Se me olvidó otra vez» e invitar a Aida Cuevas para cantar a dueto, «Té sigo amando» y «Amor eterno», y despedirse con «Paloma negra».
